Bueno, un año más terminaron los exámenes de junio, menos mal. Así que aquí me encuentro de nuevo, ante una página en blanco y con dudas sobre qué escribir. Quizás sobre el cambio climático que nos está empezando a afectar, quizás sobre los hombres que prometen cosas (como invitarte a cenar) y luego no lo cumplen, es más, ni siquiera se disculpan o sobre el pequeño placer que supone el hecho de haber terminado los ya mencionados exámenes y tener unos días o semanas para poder relajarse y aburrirse sin hacer realmente nada o haciéndolo todo (cuestión de gustos). Quizás hable de las tres.
Empezaré sin duda por la que más odio me supone, los hombres que se comportan como cerdos. Vamos a ver, si quieres ir a cenar con alguien, pues hazlo, y si no lo vas a hacer, ten al menos el detalle de avisar, porque no se, las mujeres también tenemos vida. No estamos en casa todo el día esperando a que alguien nos lleve a cenar o a comer o a lo que sea. No somos un segundo plato. Pero bueno, no pasa nada, ante cerdos de este calibre lo que se hace es olvidarse de ellos y a otra cosa mariposa, que la vida es corta y el tiempo pasa volando, como para estar perdiéndolo con alguien que no merece la pena, aunque se presente como amigo tuyo. Y además, que siempre hay alguien dispuesto a invitarte y que ese sí cumple sus promesas.
En lo referente al cambio climático, la verdad es que yo no sé a que están esperando. Tantos gritos en el cielo han puesto y tanto escándalo para qué, si lo que hay que hacer es ponerse manos a la obra y actuar ("piensa globalmente, actúa localmente", si mal no recuerdo). Vale ya de reuniones con los países más ricos del mundo, que eso lo único que hacen es sonreír para foto y viajar a gastos pagados. Este tipo de situaciones requieren medidas inmediatas y no dentro de 5 o 10 años para esperar que la gente se adapte. A mover el culo todos.
Y bueno, lo de no hacer nada siempre es relativo, porque siempre hay algo que hacer (se quiera o no se quiera) aunque sin la presión de tener que estudiar y hacer exámenes, se está bastante bien (no voy a negar lo evidente). Rascarse la barriga y no hacer nada, es algo que nos entusiasma a los españoles. Lástima que sólo a algunos les paguen por ello.
miércoles, 27 de junio de 2007
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3 comentarios:
No sabía yo que aún quedaran chicas de las de antes, que esperaban a que las llamaran para invitarlas a salir. Creía que ahora érais vosotras las que llevábais la iniciativa. Me dejas confuso...
Bueno, lo cierto es que ese artículo está escrito tras un cabreo, porque me dijeron que me iban a invitar a cenar y luego me quedé con las ganas. Pero bueno, cosas que pasan.
Jejeje
Pues chica, como bien dices, a otra cosa mariposa.
Eso si, si me permites un consejo, pues a la próxima llamas tu y le dices que te invite. Échale morro y verás que bien que te va...
Saludos!
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